En la década de los 60, Stan Getz jugó un papel crucial en la difusión mundial de la bossa nova, gracias a álbumes como Jazz Samba (1962), que introdujo el género en Estados Unidos, y el ya legendario Getz/Gilberto (1964), junto a João Gilberto y Tom Jobim, con el éxito mundial The Girl from Ipanema. Este tema se convirtió en un clásico absoluto y le valió varios premios Grammy, incluyendo Álbum del Año, consolidando a Getz como una figura universal del jazz.